Las administraciones municipales de Bello e Itagüí han decidido mantener la restricción de pico y placa en las vías nacionales que cruzan sus jurisdicciones. Esta decisión se fundamenta en la carencia de obras de infraestructura, la identificación de puntos críticos en la movilidad y la intención de reducir la tasa de accidentalidad en estas áreas.

En Bello, la medida se aplica en la autopista Norte y la avenida Regional, principales arterias que conectan el norte del Valle de Aburrá con Medellín. A pesar de que en otras localidades estas vías están exentas de la restricción, las autoridades bellanitas han optado por mantenerla debido a los desafíos específicos que enfrentan en términos de congestión vehicular y seguridad vial.

Por su parte, en Itagüí, la restricción se mantiene en la autopista Sur y otras vías nacionales que atraviesan el municipio. Las autoridades locales argumentan que, sin la implementación del pico y placa, la congestión en estas rutas se incrementaría significativamente, afectando no solo a los residentes de Itagüí, sino también a los conductores que transitan por el sur del área metropolitana.

Ambos municipios han señalado que la falta de infraestructura adecuada y la existencia de puntos críticos en sus territorios hacen necesaria la continuidad de esta medida. Además, han destacado que, desde la implementación del pico y placa en estas vías, se ha observado una disminución en la accidentalidad, lo que refuerza la decisión de mantener la restricción.

Las autoridades de Bello e Itagüí hacen un llamado a los conductores para que respeten las medidas establecidas y estén atentos a las señales de tránsito que indican las restricciones vigentes. Asimismo, invitan a la ciudadanía a utilizar medios de transporte alternativos y a planificar sus desplazamientos con antelación para contribuir a una movilidad más eficiente y segura en la región.

Esta postura contrasta con la de otros municipios del Valle de Aburrá, donde algunas vías nacionales están exentas del pico y placa. Sin embargo, las particularidades de Bello e Itagüí en términos de movilidad y seguridad vial han llevado a sus administraciones a mantener la medida en pro del bienestar de sus habitantes y de quienes transitan por sus territorios.