Ángela María Muñoz Areiza, residente y emprendedora del corregimiento de Ovejas, participa activamente en la feria campesina local cada fin de semana. Su actividad económica se centra en la comercialización productos frescos como OBLEAS, salpicones, solteritas, tintos y micheladas.

Su presencia en la feria contribuye a generar ingresos para ella y otros productores, fortaleciendo la economía del corregimiento.

Ángela nos compartió los pormenores de su rutina diaria, revelando el arduo trabajo que implica la preparación de sus productos para la venta de fin de semana.

Desde las primeras horas del día, se dedica a la selección y procesamiento de los ingredientes, asegurándose de la frescura y calidad que caracterizan sus creaciones.

El éxito del emprendimiento de Ángela es un testimonio del poder del apoyo familiar. Desde el principio, sus padres y su hermano han sido su pilar, su fuerza impulsora.

Su dedicación se refleja en cada salpicón, oblea, tinto y michelada que ofrece. Cada producto lleva el sello del cariño y el esfuerzo conjunto.

Los fines de semana, cuando la gente se reúne para disfrutar de los sabores únicos de Ángela, se siente la calidez de un ambiente familiar.

Ángela, arraigada en el corregimiento de Ovejas casi toda su vida, ha sido testigo de la transformación del corregimiento. Envía un mensaje poderoso a las mujeres: ‘¡Atrévanse a emprender!’. Con convicción, asegura que el camino del emprendimiento es posible, que se puede salir adelante con determinación y esfuerzo.