“Fabiolita” como le dicen con cariño sus clientes, es una comerciante sampedreña, que se dedica a este oficio desde hace 36 años. Está casada con Román Barrientos con quien tiene 3 hijos, todos dedicados a sus establecimientos comerciales; además, hace parte de los grupos pastorales y religiosos que lidera la Parroquia y procura llevar una vida saludable, por lo que incluye el ejercicio en sus actividades cotidianas.